Datos personales

Mi foto
"Para reirme hasta el llanto, cada tanto lloro hasta reirme a pleno"

domingo, 5 de agosto de 2012

Ya que evaluamos... evaluemos.
Mis sábados se llenaron de actividades, siempre algo para hacer, algo para decidir, algo para arreglar... pero... cual de todas esas cosas me ayudo a cumplir mis objetivos? cual a ponerme objetivos nuevos? cuanto pude poner al servicio lo que se hacer? Y eso que se hacer... le importa a quienes caminan conmigo? lo respetan? lo respeto yo al no hacer nada para ponerlo en practica?
Tomar decisiones que impliquen cambios fuertes nunca me resulto facil y siempre crei que si algo debia cambiar al fin y al cabo iba a cambiar...solito. Pero aprendi que muchas veces hay que darle un empujon porque solito no se anima. No se trata de pasar la tarde al sol, de ponerme verde con mi novio o mis amigos, de poder ver a los payasos, de dormir, de estudiar, de correr palomas... se trata de diferenciar la costumbre de lo que te llena, lo que te estanca de lo que te hace crecer. Pero se complica cuando esa "costumbre" involucra a tus amigos mas cercanos, a dias de acampe, noches de fogones, mates y mates, risas y carcajadas.
Ocupar un lugar, ser un numero, una ollita con comida diferente... o un nombre, una historia, alguien. Estuve tantas veces parada en este lugar que hasta alguna vez lo senti comodo: ser parte pero no estar ahi, estar en la ronda pensando en que hacer, sumar y restar porotos todo el tiempo. Siempre tuve una palmadita en la espalda para decidir, llamese amigos, llamese Dios, llamese como corno quiera... esta vez tiene un colorcito diferente: sentir que no creces y sentir que no ayudas. Sentir que da lo mismo estar o no estar significa que en otro lugar podes ser necesario, podes pegar el estiron.
Ahora a esperar: palmadita o empujon! (se cual sea, venga YA)